Antes morir que pecar

[Anorgi]

Antes morir que pecar

Me gustaría hacer una breve reflexión con esta admirable jaculatoria, que se debe a uno de los propósitos que Santo Domingo Savio hizo el día de su Primera Comunión.
http://es.wikipedia.org/wiki/Domingo_Savio

Yo suelo terminar mis oraciones con esta jaculatoria y no puedo evitar un especial escalofrió al darme cuenta de que mi sinceridad deja mucho que desear. Y es que siendo pecador y sabiendo cuan frágil soy y con que facilidad puedo caer en el pecado siento que lo digo casi como una rutina y en el mejor de los casos lo digo con “la boca chica”.

Conseguir decir esta jaculatoria con un deseo absoluto de que sea haga realidad nos apartaría totalmente del pecado, pues el apego a la vida es tal que huiríamos del pecado para evitar la muerte. Ni que decir tiene que no veo en esto nada de amor a Dios y sí de mucho amor a mi mismo. Este es el motivo de mi desasosiego al pronunciar esta bella jaculatoria, y he estado tentado de suprimirla de mi oraciones. Pero luego he pensado que me hace mucho bien pues es como una especie de sedante, que alivia pero no cura, que nos mantiene apartados de la tentación de pecar, aunque sea temporalmente.

En fin dejo aquí esta pequeña reflexión esperando que los foreros me den su opinión sobre el “antes morir que pecar” y si saben como conseguir hacerlo un lema para nuestra vida, un lema que nos comprometa de manera fehaciente a no volver a pecar.
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La paz del Señor sea con nosotros.
Antonio

[midka]

Hola Toño, muy fuerte jaculatoria, como bien lo dijiste. Y todo el análisis que haces es muy cierto. Cuanto miedo tenemos a veces de nuestra propia debilidad, y de desepcionar a Dios con nuestra conducta.

Realmente pensar en no pecar es algo que a veces escapa de nuestro pensamiento, y es que son tantas las ocaciones de pecar, que parece algo muy complicado llegar a no hacerlo. Es más uno no solamente puede pecar al hacer algo malo, sino también al dejar de hacer algo bueno y que está en nuestras manos (el pecado por omisión). Ante estas circunstacias se puede volver una gran carga tener una jaculatoria así. Y con esto no quiero desanimarte, sino hacer una reflexión, y espero que nos sirva a todos, sobre lo que podemos ganar al ser tan ambiciosos como tú y como lo fue San Domingo Savio.

Me enfoco en dos propositos más que tenia Dominguito Savio, como cariñosamente lo llaman nuestros hermanos salesianos, "Mis amigos serán Jesús y María" y "Estar siempre alegres". Es indiscutible que para lograr no pecar se necesita del apoyo que sólo Jesús nos puede brindar. Tener el proposito de morir antes de pecar, sin la ayuda de Jesús es vanidad, porque estaremos pensando que podemos ser capaces de evitar cualquier tipo de pecado, cuando realmente no es posible. Cuantas veces por x circunstancias tenemos que decir de esas mentiritas blancas, que se supone que no lastiman a nadie. Dominguito comprendio muy bien esto y siempre quiso acercarse a Jesús, porque estando junto a él tenemos la fortaleza para llevar una vida dirigida hacia Dios, por medio del mismo Jesús y de nuestra queridisima Madre María.

Y entonces la enseñanza de Domiguito es la de estar lo más cerca de Jesús para no pecar, y que confianza y cercania tan grande tenía Dominguito que preferiría morir antes de pecar; confianza que inspira el hecho de ser amigo intimo de Jesús. Confianza de creer en la interseción de María Santisima. Confianza que acerca a Dios y que nutre al alma de santidad.

Y bueno derivado de esto está el hecho de mostrar una alegría en todos los aspectos de nuestra vida. Porque la santidad se muestra con alegría. Por eso, el hecho de estar siempre alegre implica el hecho de no pecar, y es cuando nuno puede con toda la confianza del mundo decir, es más gritar: !Antes morir que pecar!

Así que te invito a que no renuncies a dicha jaculatoria, pero tienes que alimentarla, tal como lo hizo Dominguito, con la cercania de Jesús. Y como logras esto, bueno una manera sería comulgando a diario, pero comulgando con alegría del encuentro entre dos amigos. Jesús y yo.

Sin Jesús es imposible llevar a cabo los propositos que se marco Dominguito Savio, ¡y que los cumplio¡.

Tomando las palabras de San José María Escriba de Balaguer diria "Nuestra propia miseria es la que nos lleva a refugiarnos en Dios, a 'endiosarnos', y con Él lo podemos todo".

Es el mismo camino que nos marca San Dominguito Savio, el tener la confianza y el amor en Jesús, y sabremos que nunca, jamás le fallaremos, y entonces podremos cumplir esta jaculatoria que alimenta a nuestra alma.

Un afectuoso abrazo en Cristo Nuestro Señor
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Miguel Angel Montaño