Orpam Saretnoc Laverz Veterano
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Publicado:
Lun Nov 10, 2008 4:33 pm Asunto:
Nada nuevo pero tú ¿qué opinas?
Tema: Nada nuevo pero tú ¿qué opinas? |
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Amigos foreros un artículo de una educadora apunta a tres puntos bien conocidos por todos, creo yo. Pero, vuestra opinión es importante de verdad. Sobre todo si esos efectos conocidos son para "dejar huella".
¿Cómo se comunican los jóvenes?
“Grafiti” (dibujos esgrafiados), tatuajes, palabrotas son un fenómeno mundial y esconden el deseo de los jóvenes de ser escuchados y entendidos en su necesidad de dejar huellas y de comunicar.
Body Art
Literalmente significa arte del cuerpo, quiere decir pequeños o grandes dibujos impresos para siempre en la piel, multicolores y de formas más diferentes. ¿Por qué? El cuerpo es el gran médium del que cada uno de nosotros dispone para aliarse con el mundo externo.
Antiguamente el tatuaje servía para reconocer a esclavos, prisioneros, desertores y extranjeros, en las culturas primitivas, éste constituía un rito; a través del dolor y la sangre se reproducía simbólicamente el paso de la muerte a la vida. Era una prueba de iniciación en la que era necesario demostrar la propia capacidad de soportar el dolor. Hoy una maquinita eléctrica de agujas introduce la tinta debajo de la piel sin dolor alguno.
Detrás de esta práctica se esconde también un verdadero y propio deseo de comunicar: las iniciales del nombre, la fecha de nacimiento u otras informaciones se dibujan para siempre. Más a menudo se inciden corazones, flechas, el nombre de la persona amada... es la expresión de vínculos que quisieran convertirse en duraderos. Todavía tiene una función estética; embellece y hace más interesantes, también porque a menudo está situado en partes escondidas. Y así el cuerpo se convierte en un nuevo “texto” a leer o a exhibir.
“Grafiti”: ¿arte o vandalismo?
Dibujos gigantescos y escritos variopintos están invadiendo nuestras ciudades: autobús y metro cambian rostro en una noche y se convierten en grandes manifiestos ambulantes de las ganas de comunicar y de salir de lo gris. A finales de los años 60, en Nueva York, los adolescentes comenzaron firmando paredes y vagones del metro. La firma se hizo cada vez más grande, compleja y coloreada, hasta convertirse en obra de un grupo de muchachos, a menudo pertenecientes a minorías étnicas. Poco a poco fue una manera para expresar malestar, para contestar, para inventar un mundo multicolor. Cada grupo tiene el propio estilo que lo identifica y lo pone en competición con los otros grupos. El peligro es un componente no indiferente; se necesita coraje para pintar grafiti en sitios como depósitos de trenes y autobuses, se necesita destreza para no dejarse sorprender pintando de noche. El grafito es quizás la manera más conforme con los jóvenes para satisfacer aquel deseo presente en cada persona que es dejar huella.
Considera cómo hablas
El lenguaje juvenil está invadido por la vulgaridad, cada dos palabras enfilan tres palabrotas. Las muchachas, los muchachos parece que no perciben ya la vulgaridad de ciertos términos y a veces ni siquiera comprenden su significado.
La palabrota parece ser un medio para abolir las emociones. Los jóvenes tienen miedo de mirar a la cara los propios sentimientos, pero aún más a menudo no son capaces de llamarlos por su nombre y de vivirlos serenamente.
Lenguaje es sobre todo capacidad de entrar en relación con un “tú”; sin embargo quien no sabe decir “yo”, difícilmente podrá entrecruzar un diálogo significativo, constructivo con el otro. El método es educar al conocimiento, a la aceptación y a la manifestación auténtica de sí mismo y de los propios sentimientos, al diálogo que impide la manipulación del otro y su reducción a objeto, que reduce la necesidad del ataque verbal como defensa y medio para esconder la propia inseguridad. Una educación lingüística que promueve relaciones humanas auténticas es desde luego más útil que la reprensión.
Yo, a vuestro lado, veo y observo ¿qué pretendemos con todo esto?
Orpam Saretnoc Laverz |
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