Orpam Saretnoc Laverz Veterano
Registrado: 10 Oct 2005 Mensajes: 2474
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Publicado:
Sab Mar 04, 2006 12:26 pm Asunto:
¿Tienes esperanza?
Tema: ¿Tienes esperanza? |
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A veces, amigos míos, parece que todo se derrumba a nuestro alrededor y, por dentro (sobre todo) cuando nos cansamos. El Cardenal Suenens en un texto recogido en 1968 dijo así: "Soy una persona de esperanza porque creo que Dios es nuevo cada día... Él está creanddo el mundo en este instante... hay que estar dispuestos a esperar lo inesperado de Dios. Los caminos del Padre son habitualmente sorprendentes".
Un joven en un grupo preguntó al que lo dirigía que cómo era que se decía que Dios lo guiaba todo con ternura cuando había tanta falta de armonía entre las personas. Los compañeros miraron al dirigente interrogándose también por la interrogación del que había hablado. Entonces la respuesta fue, en síntesis, que Dios mediante las personas se va abriendo camino entre los demás y va dándose a conocer mediante las virtudes de las personas que tratamos.
Creedme que me ha hecho pensar, porque eso no es fácil. ¿A ti te resulta sencillo? Entonces creo que lo que decía el Cardenal Suenens podemos pensarlo bien, reflexionando, porque la "creación" para ti, para mí, mientras vivimos es ahora y es actual. "Este es el tiempo de la misericordia" dice la Palabra de Dios en Cuaresma. Con esperanza, con abandono en Dios, con su gracia, podemos entrar "descalzos", o sea con delicadeza, en nuestros hermanos invadiéndolos del amor de Dios que ha puesto en nosotros. Orpam Saretnoc Laverz |
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Mallinois Asiduo
Registrado: 02 Mar 2006 Mensajes: 123 Ubicación: Madrid, España
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Publicado:
Sab Mar 04, 2006 2:42 pm Asunto:
Tema: ¿Tienes esperanza? |
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Decía Gandhi: "Debes ser tú el cambio que deseas ver en el mundo."
No es propio del amor tratar de cambiar a los demás. Sí es propio el querer cambiarse as sí mismo, el mejorar el comportamiento.
Y es necesario mucho amor para querer cambiarse a sí mismo. Es decir, que el consigue realizar en sí el cambio que desea para el mundo sólo puede estar movido por un amor de tamaño gigante: el de Dios. |
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