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		Carlos Pacahuala Asiduo
 
  Registrado: 02 Oct 2005 Mensajes: 110 Ubicación: Lima - PERÚ
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           Publicado:
            Mar Ene 31, 2006 3:06 pm    Asunto:
            ¿MARÍA MURIÓ? 
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				Este es un punto del cual he oido demasidas cosas. Y cuando digo demasidas cosas es porque he escuchado nombrar a Juan Pablo II como que en una catequesis habló de que María había muerto y que el término de dormición se refiere a la muerte ¿Alguién sabe cual es la catequesis?
 
 
También he escuchado a mi Obispo en alguna homilia decir que se habal de la dormición de MAría.
 
 
Pero tengo una pregunta, sin la cual espero no ofender a nadie, solo es una pregunta de una simple razonamiento, el cual no necesariamente va de la mano con la doctrina de la Iglesia. Sin decir con esto que la doctrina de la Iglesia es ilógica. Habiendo hecho todas estas salvedades, pregunto: ¿Cómo es posible que María no muriera si su Hijo que era enteramente Dios y eteramente hombre murió? Si no había muerte no había redención, porque el así lo quizo. ¿María supera a su Hijo al no morir? ¿Será que la única muerte que nos redimiera sería la de Jesucristo? 
 
 
No se en que fuentes hablan sobre que María fue enterrada y luego ya no apareció el cuerpo, si fue enterrada es que murió.
 
 
Se que la teología no se hace en base a suspuestos, pero deseo hacer esta pregunta haber si alguno de ustedes investigó un poco más de esto y puede guiarme un poco más con el auxilio irenunciable del MAgisterio de la Iglesia _________________ Amemos la Verdad y Defendamos la Vida | 
			 
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		Bernardo Asiduo
 
  Registrado: 10 Nov 2005 Mensajes: 157 Ubicación: México DF
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           Publicado:
            Mar Ene 31, 2006 6:45 pm    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				Estimado Carlos:
 
 
Sólo de introducción (prometo recurrir al Catecismo y otras fuentes en cuanto tenga tiempo, por que estoy en la oficina), la Dormición de la Santísima Virgen es parte de la Tradición y del Magisterio de la Iglesia Católica desde principios del Cristianismo.  
 
 
La Tradición y el Magisterio han enseñado que la Santísima Virgen efectivamente murió, incluso la Tradición es que Nuestro Señor Jesucristo bajó de los Cielos para recibir personalmente el alma de su Santa Madre (el Icono Bizantino de la Dormición de la Theotokos es hermoso y muestra ésto).  Posteriormente fue enterrada en el Huerto de los Olivos (o al pie del monte de los olivos, no lo recuerdo, pero hay una Iglesia ahí) de donde fue resucitada por Nuestro Señor y Asunta a los Cielos en Cuerpo y Alma, como enseña el Dogma de la Asunción de la Virgen.
 
 
En cuanto pueda prometo poner las referencias apropiadas.  Pero la Tradición de la Iglesia Católica (Oriental y Latina) es básicamente lo que puse arriba.
 
 
En Cristo y la Theotokos.
 
 
Bernardo | 
			 
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		Carlos Pacahuala Asiduo
 
  Registrado: 02 Oct 2005 Mensajes: 110 Ubicación: Lima - PERÚ
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           Publicado:
            Mar Ene 31, 2006 8:25 pm    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				GRacias
 
 
Estaré esperando esas referencias con muchas ansias. _________________ Amemos la Verdad y Defendamos la Vida | 
			 
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		Krátistos Asiduo
 
  Registrado: 22 Dic 2005 Mensajes: 364
 
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           Publicado:
            Mar Ene 31, 2006 9:00 pm    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				Cuando el Papa Pio XII definió el misterio de la Asunción de María en la bula Munificentissimus expresamente se abstuvo de afirmar como verdad de fe la muerte de María. Esto ha favorecido la libertad de discutir y opinar sobre el asunto, y la corriente "inmortalista" creció un poco, sin embargo la mayoría de los teólogos actuales continúa afirmando que María murió.
 
Ya en la tradición antigua San Agustín firmó: "María, nacida de Adan murió a causa del pecado. La carne del Señor, nacida de María, murió para destruir los pecados" (Cfr. Enarratio in Palmun 34, 3, PL 36, 335).
 
Que Dios te bendiga. | 
			 
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		Tomás Bertrán Mercader Veterano
 
  Registrado: 01 Oct 2005 Mensajes: 1503 Ubicación: España
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           Publicado:
            Mar Ene 31, 2006 9:51 pm    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				Para mí lo importante no es si murió o se durmió. Lo importante es, creo, que su cuerpo no sufrió corrupción alguna y fue asumpta (asunción no es lo mismo que ascensión) en cuerpo y alma a los Cielos, en donde está, y es Dogma de Fe, en cuerpo y alma. _________________ NO SOY VETERANO
 
  
 
TODO POR JESUS Y MARIA. | 
			 
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		Carlos Pacahuala Asiduo
 
  Registrado: 02 Oct 2005 Mensajes: 110 Ubicación: Lima - PERÚ
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           Publicado:
            Mar Ene 31, 2006 10:23 pm    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				Tomás Bertrán Mercader
 
 
Para nada cuestiono un dogma, lo acogo en mi vida con total obediencia y docilidad de Hijo de Dios en la Iglesia.
 
 
Si lo pregunto es por tener esa curiosidad. Esta curiosidad surge por el hecho de haber tenido una gra gama de respuestas al respecto y cada uno con fundamentos respetables.
 
 
Los fundamentos magisteriales que ahora me exponen me parecen bastante contundentes.
 
 
Gracias
 
   _________________ Amemos la Verdad y Defendamos la Vida | 
			 
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		Fabrem Veterano
 
  Registrado: 05 Oct 2005 Mensajes: 1226
 
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           Publicado:
            Mar Ene 31, 2006 10:50 pm    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				Tal vez valga la pena recordar, por su valor exegético, que antes que la ascensión de Nuestro Señor y la Asunción de María, ya se había dado la llevada en cuerpo y alma al cielo de Elías y Enoc en el Antiguo Testamento. Podemos decir que ellos no eran más dignos que María, entre otras cosas, pero no se han llevado por allí los razonamientos teológicos.
 
 
No hay nada en la Biblia que fuerce a que María haya o no haya muerto antes de ser llevada en cuerpo y alma al cielo. Pudo haber muerto o pudo no haber muerto, y sólo se durmió. La Iglesia no se ha pronunciado sobre este extremo, sino que sólo sobre su asunción al cielo en cuerpo y alma.
 
 
Uno ni rechaza ni acepta el Magisterio con pensar que María murió o no murió antes de ser asunta al cielo. | 
			 
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		Antonio Asiduo
 
  Registrado: 03 Oct 2005 Mensajes: 231 Ubicación: Bogota-Colombia
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           Publicado:
            Mie Feb 01, 2006 1:10 am    Asunto:
            Existe un sepulcro de la Virgen Maria? 
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				Saludos a Todos
 
 
Aprovecho para colocar texto que me dieron del curso que hice en la Conferencia Episcopal Colombiana, espero que sirva algo de informacion
 
 
Existe un sepulcro de la Santisima Virgen?      ¿Existe un sepulcro de 
 
      la Santísima Virgen?
 
      Averiguar el lugar dónde fue sepultada la Santísima Virgen tiene sobre 
 
      todo valor histórico y arquelógico, fundamentado únicamente en la fe 
 
      humana. Recordemos que el Dogma de la Asunción sólo nos obliga a creer que 
 
      María está en cuerpo y alma en el Cielo, aunque no tome en cuenta si hay 
 
      un sepulcro, si éste está vacío, o -inclusive- si el sepulcro está en ese 
 
      lugar o en otro.
 
      Sin embargo, como por Tradición Apostólica sabemos que la Asunción tuvo 
 
      lugar en el sepulcro de María, no pareciera ocioso tratar de dilucidar 
 
      también dónde fue enterrada la Madre de Dios. 
 
      Sabemos, entonces, que María vivió sus últimos días en Jerusalén. Pero, 
 
      cabe preguntarnos ¿se conoce también el lugar preciso donde acaeció su 
 
      “dormición”? 
 
      A esto se puede contestar que sí. El Padre Cardoso nos dice que la 
 
      tradición señala como el lugar de la muerte el Monte Sión, en el célebre 
 
      Cenáculo donde Jesús instituyó la Sagrada Eucaristía. Esta edificación, 
 
      como otras de las familias pudientes de la época, tenía varios 
 
      departamentos: uno de ellos había sido cedido por la dueña, María, madre 
 
      de Juan Marcos, a María, la Madre de Jesús y al Apóstol Juan, a quien Jeús 
 
      le había confiado en la cruz el cuido de su Madre, por lo que podemos 
 
      concluir, entonces, que ése sería el lugar del tránsito de María. 
 
      En cuanto al sitio de la sepultura, el sepulcro de María Santísima es uno 
 
      de los muchos que había en Getsemaní, al pie del Monte Olivete. 
 
      Ambas cosas están muy bien fundamentadas por el Padre Cardoso en su 
 
      estudio titulado“La Asunción de María Santísima”, ya antes citado, editado 
 
      en México el año de la declaración del Dogma (1950). 
 
      El autor se basa en algunas obras apócrifas (es decir, obras que no son de 
 
      los autores a quienes se atribuyeron, ni tienen carácter ninguno de 
 
      revelación divina), a saber: Las Actas de San Juan (año 160-170), 
 
      atribuidas falsamente a San Prócoro, uno de los siete primeros Diáconos, 
 
      díscipulo de San Juan; otras dos obras atribuidas también falsamente a San 
 
      Ignacio mártir (año 365). Ambos documentos, sin tener intención expresa de 
 
      hacerlo, señalan que María vivió en el Monte Sión. 
 
      Además nos presenta como sustentación de esta realidad una carta, que sí 
 
      es auténtica, la cual data del año 363, escrita por Dionisio el Místico 
 
      (quien no se debe confundir con Dionisio el Aeropagita, discípulo de San 
 
      Pablo), la cual nos trae un relato de la Asunción, en la que se define el 
 
      lugar: “Los Apóstoles, inflamados enteramente en Amor de Dios, y en cierto 
 
      modo arrebatados en éxtasis, lo cargaron cuidadosamete (el cuerpo muerto 
 
      de María Santísima) en sus brazos, según la orden de las alturas del 
 
      Salvador de todos. Lo depositaron en el lugar destinado para la sepultura 
 
      en el lugar llamado Getsemaní ...” 
 
      Nos traen, además, otros testamentos apócrifos, de valor histórico y 
 
      arqueológico, entre los cuales destaca uno muy convincente: la reseña de 
 
      la peregrinación que hizo San Arnulfo al Monte Sión, redactada por un 
 
      monje escocés, llamado Adamnano en el año 670, en la que se ve un plano 
 
      rudimentario de la Basílica de Sión, en el cual se lee: Hic Sacta Maria 
 
      obiit (Aquí murió Santa María). La Basílica de Sión había sido levantada 
 
      en el siglo IV y estaba ubicada en el flanco sur del Santo Cenáculo, 
 
      encerrando con su construcción las antiguas dependencias que habitaran la 
 
      Virgen y San Juan, y, sobre todo, los lugares sagrados de esa edificación. 
 
 
      Es interesante notar que sobre la vivienda última de María han habido 
 
      ciertas discusiones y opiniones diversas. Pero nunca las hubo acerca del 
 
      lugar de su sepultura, por lo que podemos decir que el lugar de su 
 
      Asunción gloriosa al Cielo fue Getsemaní. 
 
      En los tiempos de Jesucristo, el Monte Olivete estaba separado del Monte 
 
      Sion por un estrecho vallecito, recorrido en toda su longitud por la 
 
      barranca del Cedrón, la cual estaba casi seca la mayor parte del año. A 
 
      orillas de la barranca, al pie del Monte Olivete, estaba el Huerto de 
 
      Getsemaní (Huerto de los Olivos), donde Jesucristo solía ir a orar por las 
 
      noches cuando se encontraba en Jerusalén y donde precisamente fue 
 
      aprehendido por los soldados la noche anterior a su crucifixión. 
 
      La facilidad con que Jesús entraba a aquel jardín ha hecho suponer a 
 
      algunos historiadores que el lugar era propiedad de la familia de su 
 
      Madre. Sabemos que los judíos acostumbraban a tener sus sepulcros en sus 
 
      mismas propiedades. Sabemos que Jesús fue una excepción: su cuerpo fue 
 
      enterrado en un sepulcro propiedad de José de Arimatea, ubicado al pie del 
 
      Gólgota, donde fue la Crucifixión, debido a la rapidez con que hubo que 
 
      enterrar su cuerpo por el apuro de la fiesta del Sábado (cfr. Jn. 38-42). 
 
      Los Apóstoles y demás miembros de la comunidad cristiana naciente 
 
      comenzaron a venerar los sitios santificados por Jesús y por su Madre, 
 
      cuando vivieron en la tierra: el Cenáculo, el huerto de Getsemaní, la cima 
 
      del Olivete, donde tuvo lugar la Ascensión de Jesucristo al Cielo; la Vía 
 
      Dolorosa que va desde Sión al Calvario, el Gólgota, etc. Señalaron todos 
 
      estos lugares, pero muy especialmente los sepulcros de Jesús y de María. 
 
      Sabemos que en el año 70 tuvo lugar la destrucción de Jerusalén, anunciada 
 
      con todos sus detalles por Jesucristo, de manos de las tropas romanas. 
 
      Estas levantaron verdaderas murallas de piedra alrededor de la ciudad. 
 
      Talaron gran parte del Monte Olivete y abrieron fosos y trincheras, lo 
 
      cual dio por resultado que las entradas de los sepulcros de Getsemaní 
 
      quedaran bloqueadas y sepultadas bajo ruinas y escombros, como quedó toda 
 
      Jerusalén. Creen algunos que de lo poco que quedó en pie fue el Cenáculo. 
 
      Posteriormente el Emperador Adriano, más bien favorable a los judíos, 
 
      reconstruyó la ciudad, pero haciendo de ella una ciudad netamente pagana. 
 
      Así, rellenó y niveló las depresiones que rodeaban al Monte Sión, además 
 
      de hacer construir un templo a Venus en el sitio del sepulcro de 
 
      Jesucristo. 
 
      Parece que el sepulcro de María escapó a la reconstrucción y a su 
 
      consiguiente profanación, porque estaba oculto bajo la tierra cuando se 
 
      hizo el relleno de nivelación. 
 
      Cuando Constantino apoyó y promovió la Iglesia, y su madre Santa Elena se 
 
      ocupó de restaurar y adornar los lugares santos, descubrió el Santo 
 
      Sepulcro del Señor, en donde encontró la verdadera cruz, y levantó sobre 
 
      éste una gran Basílica. Hizo lo mismo con el Cenáculo, sobre el cual 
 
      construyó la Basílica de la Dormición. Sobre el sepulcro de María no se 
 
      dice nada en esa ocasión, pero algunos suponen que sí se ocupó de éste 
 
      Santa Elena, por un asunto de estilo en la construcción: el sepulcro de 
 
      María está -como pueden verlo los peregrinos que van a Tierra Santa- 
 
      separado de la roca por una rotonda semejante a la del sepulcro de 
 
      Jesucristo. 
 
      En el siglo V comienza a haber testimonios escritos que hablan del 
 
      sepulcro de María. Uno de éstos, Breviarius de Hierusalem, de un autor 
 
      anónimo, al describir los Santos Lugares del valle del Cedrón, escribe lo 
 
      siguiente: “Allí se ve la Basílica de Santa María y en ella está su 
 
      sepulcro. Allí entregó Judas a Nuestro Señor Jesucristo.” 
 
            4 - ¿Dónde murió?6 - ¿Dónde fue la Asunción? Índice | 
			 
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		Antonio Asiduo
 
  Registrado: 03 Oct 2005 Mensajes: 231 Ubicación: Bogota-Colombia
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           Publicado:
            Mie Feb 01, 2006 1:14 am    Asunto:
            Donde fue la Asuncion de la Virgen 
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				Dónde fue la Asunción de la Virgen? 
 
      ¿Dónde fue la Asunción?
 
      Como por Tradición Apostólica sabemos que la Asunción tuvo lugar en el 
 
      sepulcro de María, podemos concluir, por todo lo dicho en el capítulo 
 
      anterior, que la Asunción tuvo lugar en el mismo sitio donde Jesús fue 
 
      apresado antes de su Pasión y Muerte; es decir, en el Huerto de Getsemaní, 
 
      donde oró así al Padre la noche antes de morir: “Padre, si es posible que  pase de Mí esta prueba, pero no se haga mi voluntad, sino la tuya” | 
			 
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		Antonio Asiduo
 
  Registrado: 03 Oct 2005 Mensajes: 231 Ubicación: Bogota-Colombia
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           Publicado:
            Mie Feb 01, 2006 1:16 am    Asunto:
            Documentos históricos sobre la Asunción de la Virgen 
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				Sigo con la informacion
 
espero que les sirva
 
 
Documentos históricos sobre la Asunción de la Virgen
 
      Documentos históricos
 
      Presentamos dos documentos históricos reseñados por el Padre Cardoso en su 
 
      publicación “La Asunción de María Santísima”. 
 
      El primero es la carta de Dionisio el Egipcio o el Místico (no Dionisio el 
 
      Areopagita, discípulo de San Pablo) a Tito, Obispo de Creta, que data de 
 
      fines del Siglo III a mediados del Siglo IV, y publicada por primera vez 
 
      en alemán por el Dr. Weter de la Facultad de Tubinga en 1887. Dice el 
 
      Padre Cardoso que el Dr. Nirschl, que la ha estudiado, fija como fecha el 
 
      año 363, declarándola absolutamente auténtica. Esta misma carta ha sido 
 
      mencionada en el Capítulo 5 de nuestro estudio (¿Existe un sepulcro de la 
 
      Santísima Virgen María?) al tratar de definir el sitio de la sepultura de 
 
      María. 
 
      Este documento histórico es importantísimo para conocer cuál era la 
 
      tradición en Jerusalén acerca de la Asunción de María, pues es lo más 
 
      próximo que se conoce a la tradición de los mismos testigos presenciales 
 
      del hecho, es decir, los Apóstoles. Dice así: 
 
      “Debes saber, ¡oh noble Tito!, según tus sentimientos fraternales, que al 
 
      tiempo en que María debía pasar de este mundo al otro, es a saber a la 
 
      Jerusalén Celestial, para no volver jamás, conforme a los deseos y vivas 
 
      aspiraciones del hombre interior, y entrar en las tiendas de la Jerusalén 
 
      superior, entonces, según el aviso recibido de las alturas de la gran luz, 
 
      en conformidad con la santa voluntad del orden divino, las turbas de los 
 
      santos Apóstoles se juntaron en un abrir y cerrar de ojos, de todos los 
 
      puntos en que tenían la misión de predicar el Evangelio. Súbitamente se 
 
      encontraron reunidos alrededor del cuerpo todo glorioso y virginal. Allí 
 
      figuraron como doce rayos luminosos del Colegio Apostólico. Y mientras los 
 
      fieles permanecían alrededor, Ella se despidió de todos, la augusta 
 
      (Virgen) que, arrastrada por el ardor de sus deseos, elevó a la vez que 
 
      sus plegarias, sus manos todas santas y puras hacia Dios, dirigiendo sus 
 
      miradas, acompañadas de vehementes suspiros y aspiraciones a la luz, hacia 
 
      Aquél que nació de su seno, Nuestro Señor, su Hijo. Ella entregó su alma 
 
      toda santa, semejante a las esencias de buen olor y la encomendó en las 
 
      manos del Señor. Así es como, adornada de gracias, fue elevada a la región 
 
      de los Angeles, y enviada a la vida inmutable del mundo sobrenatural. 
 
      “Al punto, en medio de gemidos mezclados de llantos y lágrimas, en medio 
 
      de la alegría inefable y llena de esperanza que se apoderó de los 
 
      Apóstoles y de todos los fieles presentes, se dispuso piadosamente, tal y 
 
      como convenía hacerlo con la difunta, el cuerpo que en vida fue elevado 
 
      sobre toda ley de la naturaleza, el cuerpo que recibió a Dios, el cuerpo 
 
      espiritualizado, y se le adornó con flores en medio de cantos instructivos 
 
      y de discursos brillantes y piadosos, como las circunstancias lo exigían. 
 
      Los Apóstoles inflamados enteramente en amor de Dios, y en cierto modo, 
 
      arrebatados en éxtasis, lo cargaron cuidadosamente sobre sus brazos, como 
 
      a la Madre de la Luz, según la orden de las alturas del Salvador de todos. 
 
      Lo depositaron en el lugar destinado para la sepultura, en el lugar 
 
      llamado Getsemaní. 
 
      “Durante tres días seguidos, ellos oyeron sobre aquel lugar los aires 
 
      armoniosos de la salmodia, ejecutada por voces angélicas, que extasiaban a 
 
      los que las escuchaban; después nada más. 
 
      “Eso supuesto para confirmación de lo que había sucedido, ocurrió que 
 
      faltaba uno de los santos Apóstoles al tiempo de su reunión. Este llegó 
 
      más tarde y obligó a los Apóstoles que le enseñasen de una manera palpable 
 
      y al descubierto el precioso tesoro, es decir, el mismo cuerpo que encerró 
 
      al Señor. Ellos se vieron, por consiguiente, obligados a satisfacer el 
 
      ardiente deseo de su hermano. Pero cuando abrieron el sepulcro que había 
 
      contenido el cuerpo sagrado, lo encontraron vacío y sin los restos 
 
      mortales. Aunque tristes y desconsolados, pudieron comprender que, después 
 
      de terminados los cantos celestiales, había sido arrebatado el santo 
 
      cuerpo por las potestades etéreas, después de estar preparado 
 
      sobrenaturalmente para la mansión celestial de la luz y de la gloria 
 
      oculto a este mundo visible y carnal, en Jesucristo Nuestro Señor, a quien 
 
      sea gloria y honor por los siglos de los siglos. Amén”. 
 
      El segundo documento es de San Juan Damasceno, Doctor de la Iglesia. Es un 
 
      sermón por él predicado en la Basílica de la Asunción en Jerusalén, por el 
 
      año 754, ante varios Obispos y muchos Sacerdotes y fieles: 
 
      “Ahí tenéis con qué palabras nos habla este glorioso sepulcro. Que tales 
 
      cosas hayan sucedido así, lo sabemos por la “Historia Eutiquiana”, que en 
 
      su Libro II, capítulo 40, escribe: 
 
      `Dijimos anteriormente cómo Santa Pulqueria edificó muchas Iglesias en la 
 
      ciudad de Constantinopla. Una de éstas fue la de las Blanquernas, en los 
 
      primeros años del Imperio de Marciano. Habiendo, pues, construído el 
 
      venerable templo en honor de la benditísima y siempre Virgen María, Madre 
 
      de Dios ... buscaban diligentemente los Emperadores llevar allí el sagrado 
 
      cuerpo de la que había llevado en su seno al Todopoderoso, y llamando a 
 
      Juvenal, Arzobispo de Constantinopla, le pidieron las sagradas reliquias'. 
 
 
      “Juvenal contestó en estos términos: `Aunque nada nos dicen las Sagradas 
 
      Escrituras de lo que ocurrió en la muerte de la Madre de Dios, sin embargo 
 
      nos consta por la antigua y verídica narración que los Apóstoles, 
 
      esparcidos por el mundo por la salud de los pueblos, se reunieron 
 
      milagrosamente en Jerusalén, para asistir a la muerte de la Santísima 
 
      Virgen.' 
 
      “La Historia Eutiquiana nos dice luego, que los Apóstoles, después de la 
 
      sepultura de la Virgen, oyeron durante tres días los coros angélicos; 
 
      después nada más. Ahora bien, como Santo Tomás llegó tarde, abrieron la 
 
      tumba y debieron comprobar que no estaba allí el sagrado cuerpo. Repuestos 
 
      de su estupor, no acertaron los Apóstoles a inferir otra cosa, sino que 
 
      Aquél que le plugo nacer de María, conservándola en su inviolable 
 
      virginidad, se complació también en preservar su cuerpo virginal de la 
 
      corrupción y en admitirlo en el Cielo antes de la resurrección general' 
 
      “Oído este relato, Marciano y Pulqueria pidieron a Juvenal que les enviase 
 
      el ataúd y los lienzos de la gloriosa y santísima Madre de Dios, todo 
 
      cuidadosamente sellado. Y, habiéndolos recibido, los depositaron en la 
 
      dicha Iglesia de la Madre de Dios en las Blanquernas. Y es así como 
 
      sucedió todo esto”. 
 
      Nos dice el Padre Cardoso que esta “Historia Eutiquiana”, de la que tomó 
 
      San Juan Damasceno el relato, se cree por los Padres Bolandistas, que data 
 
      de San Eutiquio, contemporáneo y amigo de San Juvenal, el cual ocupó la 
 
      sede de Jerusalén del año 418 al 458. El relato de San Juvenal es 
 
      considerado como absolutamente histórico y nos dice que la Iglesia 
 
      Católica lo ha incluido en el Breviario (Liturgia de las Horas). 
 
      Por otra parte, no cabe la menor duda de que el ataúd y mortaja de María 
 
      fueron, desde la segunda mitad del Siglo V, objeto de veneración para los 
 
      fieles en la Basílica de los Blanquernos en Constantinopla. 
 
            10 - Testimonios de los Místicos 12 - El Dogma de la AsunciónÍndice | 
			 
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		Antonio Asiduo
 
  Registrado: 03 Oct 2005 Mensajes: 231 Ubicación: Bogota-Colombia
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           Publicado:
            Mie Feb 01, 2006 1:17 am    Asunto:
            De qué murió la Virgen? 
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				De qué murió la Virgen?
 
      ¿De qué murió la Virgen?
 
      Royo Marín responde así a la pregunta ¿de qué murió María?: ""No parece 
 
      que muriera de enfermedad, ni de vejez muy avanzada, ni por accidente 
 
      violento (martirio), ni por ninguna otra causa que por el amor ardentísimo 
 
      que consumía su corazón”
 
      No creamos que esta afirmación de que el amor a Dios haya sido la causa 
 
      del fallecimiento (¿o desfallecimiento?) de María, sea una ilusión 
 
      poética, producto de una piedad ingenua y entusiasta para con la Santísima 
 
      Virgen. No. Esta enseñanza se funda en testimonios de los Santos Padres, 
 
      quienes dejaron traslucir con frecuencia su pensamiento sobre este 
 
      particular.
 
      El Padre Joaquín Cardoso, s.j. cita a San Alberto Magno: “Creemos que 
 
      murió sin dolor y de amor”. Nos asegura, además, que a San Alberto siguen 
 
      otros como el Abad Guerrico, Ricardo de San Lorenzo, San Francisco de 
 
      Sales, San Alfonso María de Ligorio y otros muchísimos.”
 
      Y veamos qué nos dice Juan Pablo II sobre las causas de la muerte de la 
 
      Madre de Dios: “Más importante es investigar la actitud espiritual de la 
 
      Virgen en el momento de dejar este mundo”. Entonces se apoya en San 
 
      Francisco de Sales, quien considera que la muerte de María se produjo como 
 
      un ímpetu de amor. En el Tratado del Amor de Dios habla de una muerte “en 
 
      el Amor, a causa del Amor y por Amor” <Tratado del Amor de Dios, Lib. 7, 
 
      12-14> (JP II, 25-junio-99).
 
      Royo Marín cita a Alastruey, quien en su Tratado de la Virgen Santísima 
 
      afirma: “La Santísima Virgen acabó su vida con muerte extática, en fuerza 
 
      del divino amor y del vehemente deseo y contemplación intensísima de las 
 
      cosas celestiales”. 
 
      Es nuevamente Juan Pablo II quien aclara aún más este punto: “Cualquiera 
 
      que haya sido el hecho orgánico y biológico que, desde el punto de vista 
 
      físico, le haya producido la muerte, puede decirse que el tránsilo de esta 
 
      vida a la otra fue para María una maduración de la gracia en la gloria, de 
 
      modo que nunca mejor que en este caso la muerte pudo concebierse como una 
 
      `dormición'” 
 
      Luego basándose en la Tradición para tratar este tema, el Papa nos aclara 
 
      aún más este maravilloso suceso: 
 
      “Algunos Padres de la Iglesia describen a Jesús mismo que va a recibir a 
 
      su Madre en el momento de la muerte, para introducirla en la gloria 
 
      celeste. Así, presentan la muerte de María como un acontecimiento de amor 
 
      que la llevó a reunirse con su Hijo Divino, para compartir con El la vida 
 
      inmortal. Al final de su existencia terrena habrá experimentado, como San 
 
      Pablo -y más que él- el deseo de liberarse del cuerpo para estar con 
 
      Cristo para siempre”. <cf. Flp. 1, 23> (JP II, 25-junio-97) 
 
      Otro ilustre Mariólogo, Garriguet, también citado por Royo Marín, nos 
 
      describe más detalles sobre la vida y la dormición de la Madre de Dios: 
 
      “María murió sin dolor, porque vivió sin placer; sin temor, porque vivió 
 
      sin pecado; sin sentimiento, porque vivió sin apego terrenal. Su muerte 
 
      fue semejante al declinar de una hermosa tarde, como un sueño dulce y 
 
      apacible; era menos el fin de una vida que la aurora de una existencia 
 
      mejor. Para designarla la Iglesia encontró una palabra encantadora: la 
 
      llama sueño o dormición de la Virgen”. 
 
      Pero es el elocuentísmo predicador francés del Siglo XVI-XVII, Bossuet, 
 
      Obispo de Meaux, quien en su Sermón Segundo sobre la Asunción de María nos 
 
      describe con los más bellos detalles qué significa morir de amor y cómo 
 
      fue este maravilloso pasaje de la vida de la Madre de Dios: 
 
      “El amor profano es quejumbroso y está diciendo siempre: languidezco y 
 
      muero de amor. Pero no es sobre este fundamento en el que me baso para 
 
      haceros ver que el amor puede dar la muerte. Quiero establecer esta verdad 
 
      sobre una propiedad del Amor Divino. Digo, pues, que el Amor Divino, trae 
 
      consigo un despojamiento y una soledad inmensa, que la naturaleza no es 
 
      capaz de sobrellevar; una tal destrucción del hombre entero y un 
 
      aniquilamiento tan profundo en nosotros mismos, que todos los sentidos son 
 
      suspendidos. Porque es necesario desnudarse de todo para ir a Dios, y que 
 
      no haya nada que nos retenga. Y la raíz profunda de tal separación es esos 
 
      tremendos celos de Dios, que quiere estar solo en un alma, y no puede 
 
      sufrir a nadie más que a Sí mismo, en un corazón que quiere amor. (Amarás 
 
      a Dios sobre todas las cosas. Si alguno ama a su padre o a su madre o a 
 
      sus hermanos más que a Mí, no es digno de Mí).” 
 
      “Ya podemos comprender esta soledad inmensa que pide un Dios celoso. 
 
      Quiere que se destruya, que se aniquile todo lo que no es El. Y, sin 
 
      embargo, se oculta y no da a ninguno un punto de donde asirlo 
 
      materialmente, de tal modo que el alma, desprendida por una parte de todo, 
 
      y por otra, no encontrado aquí el medio de poseer a Dios efectivamente, 
 
      cae en debilidades y desfallecimientos inconcebibles. Y cuando el amor 
 
      llega a su perfección, el desfallecimiento llega hasta la muerte, y el 
 
      rigor hasta perder la vida.” 
 
      “Y he aquí lo que da el golpe mortal: es que el corazón despojado de todo 
 
      amor superfluo, es atraído con fuerza al solo Bien necesario, con una 
 
      fuerza increíble y, no encontrándolo, muere de congoja. `El hombre 
 
      insensato' -dice San Pablo- `no entiende estas cosas y el sensual no las 
 
      concibe; pero nosotros hablamos de la sabiduría entre los perfectos y 
 
      explicamos a los espirituales los misterios del espíritu'. Digo, pues, que 
 
      el alma, desprendida de todo anhelo de lo superfluo, es impulsada y 
 
      atraída hacia Dios con una fuerza infinita, y es esto lo que le da la 
 
      muerte; porque , de un lado, se arranca de todos los objetos sensibles, y 
 
      por otro, el objeto que busca es tan inaccesible aquí, que no puede 
 
      alcanzarlo. No lo ve sino por la fe, es decir: no lo ve; no lo abraza, 
 
      sino en medio de sombras y como a través de las nubes, es decir, que no 
 
      tiene de dónde asirlo. Y el amor frustrado se vuelve contra sí mismo y se 
 
      hace a sí mismo insoportable.” 
 
      “Yo he querido daros alguna idea del amor de la Santísima Virgen durante 
 
      los días de su destierro y la cautividad de su vida mortal. No, no; los 
 
      Serafines mismos no pueden entender, ni dignamente explicar, con qué 
 
      fuerza era atraída María a su Bien Amado, ni con qué violencia sufría su 
 
      corazón en esta separación. Si jamás hubo algún alma tan penetrada de la 
 
      Cruz y de este espíritu de destrucción santa, fue la Virgen María. Ella 
 
      estaba, pues, siempre muriendo, siempre llamando a su Bien Amado con un 
 
      anhelo mortal”. 
 
      “No busquéis, pues, almas santas, otra causa de la muerte de la Santa 
 
      Virgen. Su amor era tan ardiente, tan fuerte, tan inflamado, que no 
 
      lanzaba un suspiro que no debiera romper todas las ligaduras de esta vida 
 
      mortal; no enviaba un deseo al Cielo que no hubiera debido arrastrar 
 
      consigo su alma entera. Os he dicho antes, cristianos, que su muerte fue 
 
      milagrosa, pero me veo obligado a cambiar de opinión: su muerte no fue el 
 
      milagro, el milagro estuvo en la suspensión de esa muerte, en que pudiera 
 
      vivir separada de su Bien Amado. Vivía, sin embargo, porque esa era la 
 
      determinación de Dios, para que fuese conforme con Jesucristo su Hijo 
 
      crucificado por el martirio insoportable de una larga vida, tan penosa 
 
      para Ella, como necesaria para la Iglesia. Pero como el Divino Amor 
 
      reinaba en su corazón sin ningún obstáculo, iba de día en día aumentándose 
 
      sin cesar por el ejercicio, creciendo y desarrollándose por sí mismo, de 
 
      modo que al fin llegó a tal perfección, que la tierra ya no era capaz de 
 
      contenerla. Así, no fue otra causa de la muerte de María que la vivacidad 
 
      de su amor”. 
 
      “Y esta alma santa y bienaventurada atrae consigo a su cuerpo a una 
 
      resurrección anticipada. Porque, aunque Dios ha señalado un término común 
 
      a la resurrección de todos los muertos, hay razones particulares que le 
 
      obligan a avanzar ese término en favor de la Virgen María”. (Bossuet, 
 
      citado por el Padre Joaquín Cardozo s.j. enLa Asunción de María 
 
      Santísima). | 
			 
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		Carlos Pacahuala Asiduo
 
  Registrado: 02 Oct 2005 Mensajes: 110 Ubicación: Lima - PERÚ
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           Publicado:
            Mie Feb 01, 2006 2:31 am    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				Antonio 
 
 
Muchas gracias. Muchas gracias. _________________ Amemos la Verdad y Defendamos la Vida | 
			 
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		Fabrem Veterano
 
  Registrado: 05 Oct 2005 Mensajes: 1226
 
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           Publicado:
            Mie Feb 01, 2006 3:52 am    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				 	  | Maru Courtney escribió: | 	 		  
 
Cuando se habla de cuerpo "incorrupto"  no significa que si murio y no se descompuso??? | 	  
 
 
Podría ser, Maru, pero no es así necesariamente. Y la razón es que la Iglesia ha evitado deliberadamente pronunciarse sobre este asunto ni a favor ni en contra.
 
 
La explicación más querida por la Tradición es que María se durmió, y por esta razón se habla de "la dormición", pero no hay seguridad sobre esto. 
 
 
Pero pudo muy bien haber muerto, y resucitado de una vez para ser asunta al cielo, que de todos modos tenía que morir a su biología anterior, porque cuando el cuerpo humano es glorificado debe literalmente morir a su estado anterior para pasar a ser gobernado por otras leyes completamente diferentes. La materia corpórea deja completamente de ser como era cuando estaba en el espacio-tiempo, y esta transformación significa necesariamente la muerte de la materia anterior.
 
 
La pregunta no sería, entonces, si María murió, sino en qué momento, si en la tierra o mientras estaba siendo asunta al cielo, porque su cuerpo tuvo que dejar de existir de la forma en que había existido en la tierra, entre otras razones, para volverse joven, ligera, volátil, sin dolor, sin necesidad de comer, etc.
 
 
Lo cierto es que María fue asunta en cuerpo y alma al cielo. Si murió, cómo y cuándo es sólo parte de este proceso de glorificación, que es realmente secundario al hecho de que fue asunta al cielo y glorificada. | 
			 
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		Krátistos Asiduo
 
  Registrado: 22 Dic 2005 Mensajes: 364
 
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           Publicado:
            Mie Feb 01, 2006 7:50 am    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				En la Biblia se usa dormir como sinónimo de morir:
 
 
Hechos 7
 
59 Mientras le apedreaban, Esteban hacía esta invocación: «Señor Jesús, recibe mi espíritu». 
 
60 Después dobló las rodillas y dijo con fuerte voz: «Señor, no les tengas en cuenta este pecado». Y diciendo esto, se durmió.
 
 
También Pablo afirma que algunos no morirán al final de los tiempos pero sin embargo serán transformados, (puede ser que conociese esta forma por María):
 
 
ICorintios 15
 
51 ¡Mirad! Os revelo un misterio: No moriremos todos, mas todos seremos transformados. 
 
52 En un instante, en un pestañear de ojos, al toque de la trompeta final, pues sonará la trompeta, los muertos resucitarán incorruptibles y nosotros seremos transformados.
 
 
 
La polémica sigue abierta mientras la Iglesia Católica no lo defina. | 
			 
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		Jose Fernando Ortiz Constante
 
  Registrado: 16 Ene 2006 Mensajes: 696 Ubicación: Bogotá, Colombia
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           Publicado:
            Mie Feb 01, 2006 9:32 pm    Asunto:
            Re: ¿MARÍA MURIÓ? 
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				 	  | Carlos Pacahuala escribió: | 	 		  Este es un punto del cual he oido demasidas cosas. Y cuando digo demasidas cosas es porque he escuchado nombrar a Juan Pablo II como que en una catequesis habló de que María había muerto y que el término de dormición se refiere a la muerte ¿Alguién sabe cual es la catequesis?
 
 
También he escuchado a mi Obispo en alguna homilia decir que se habal de la dormición de MAría.
 
 
Pero tengo una pregunta, sin la cual espero no ofender a nadie, solo es una pregunta de una simple razonamiento, el cual no necesariamente va de la mano con la doctrina de la Iglesia. Sin decir con esto que la doctrina de la Iglesia es ilógica. Habiendo hecho todas estas salvedades, pregunto: ¿Cómo es posible que María no muriera si su Hijo que era enteramente Dios y eteramente hombre murió? Si no había muerte no había redención, porque el así lo quizo. ¿María supera a su Hijo al no morir? ¿Será que la única muerte que nos redimiera sería la de Jesucristo? 
 
 
No se en que fuentes hablan sobre que María fue enterrada y luego ya no apareció el cuerpo, si fue enterrada es que murió.
 
 
Se que la teología no se hace en base a suspuestos, pero deseo hacer esta pregunta haber si alguno de ustedes investigó un poco más de esto y puede guiarme un poco más con el auxilio irenunciable del MAgisterio de la Iglesia | 	  
 
 
Un pensamiento ante tanta controversia....
 
Dice el apóstol Pablo:
 
Escuchen, les voy a revelar un gran misterio:
 
no todos moriremos.....pero todos seremos transformados.
 
En un instante, en un abrir y cerra de ojos, al son de la última trompeta, los muertos resucitarán incorruptibles y nosotros seremos transformados. Porque es necesario que este cuerpo corruptible se revista de incorruptibilidad y que este ser mortal se revista de inmortalidad.
 
Dice:todos seremos transformados, pero no todos moriremos....
 
 
Pregunta:
 
Si María, de acuerdo con las enseñanzas apostólicas y proféticas, era llena de Gracia....desde  su misma "concepción", no era ya un ser inmortal con un cuerpo incorruptible?
 
Queda abierta la reflexión..... _________________ I de Juan 1,1-4
 
Nosotros, Señor, te vemos y escuchamos.....
 
 
 
IGLESIA_MADRE UNIVERSAL.....
 
MUJER revestida de sol....
 
Dios....en/con.... nosotros. | 
			 
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		Krátistos Asiduo
 
  Registrado: 22 Dic 2005 Mensajes: 364
 
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           Publicado:
            Jue Feb 02, 2006 8:07 am    Asunto:
            Re: ¿MARÍA MURIÓ? 
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				 	  | Jose Fernando Ortiz escribió: | 	 		  Un pensamiento ante tanta controversia....
 
Dice el apóstol Pablo:
 
Escuchen, les voy a revelar un gran misterio:
 
no todos moriremos.....pero todos seremos transformados.
 
En un instante, en un abrir y cerra de ojos, al son de la última trompeta, los muertos resucitarán incorruptibles y nosotros seremos transformados. Porque es necesario que este cuerpo corruptible se revista de incorruptibilidad y que este ser mortal se revista de inmortalidad.
 
Dice:todos seremos transformados, pero no todos moriremos....
 
 
Pregunta:
 
Si María, de acuerdo con las enseñanzas apostólicas y proféticas, era llena de Gracia....desde  su misma "concepción", no era ya un ser inmortal con un cuerpo incorruptible?
 
Queda abierta la reflexión..... | 	  
 
 
Te devuelvo la pregunta:
 
Si Cristo era lo mismo que María, y además era Dios, ¿cómo es que murió? | 
			 
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		Albert + Moderador
  
 
  Registrado: 03 Oct 2005 Mensajes: 27940 Ubicación: Puerto Rico
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           Publicado:
            Jue Feb 02, 2006 5:03 pm    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				Hermano Krátistos:
 
 
Dices:
 
 	  | Cita: | 	 		  | Si Cristo era lo mismo que María, y además era Dios, ¿cómo es que murió? | 	  
 
 
Cristo no era lo mismo que María, comencemos por ahí, creo entender tu punto pero es meritorio aclararlo. Ahora bien, Jesús muere para abrirnos camino a los que no somos llenos de gracia como María para vencer la corrupción de la muerte y ser transformados de incorruptibilidad. Él muere para al vencer la muerte con su Resurrección redimirnos y mostrarnos el camino a seguir. Si no lo hubiera hecho, nada podríamos contra la muerte y su corrupción. ¿Crees que Jesús necesitaba morir? Él en su realidad, en su ecencia divina no murió y no puede ser muerto pues es Dios, pero en su naturaleza humana se sometió a la muerte de cruz para el perdón de nuestros pecados y para vencer la muerte misma y lograrnos la salvación. _________________
   
 
Transfíge, dulcíssime Dómine Jesu
 
Albert González Villanueva, OFS | 
			 
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		Tomás Bertrán Mercader Veterano
 
  Registrado: 01 Oct 2005 Mensajes: 1503 Ubicación: España
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           Publicado:
            Jue Feb 02, 2006 5:19 pm    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				Albert, y yo añadiría que la Virgen María también murió sin conocer la corrupción para así sumarse a la redención de Cristo y vencer la muerte. Por eso es co-redentora con Cristo. María se sumó a la crucifixión a su Hijo en el Gólgota y se sumó también a su muerte y resurrección, y no creo estar en contra del Magisterio de la Iglesia. Si lo estuviese, rectificaría automáticamente. _________________ NO SOY VETERANO
 
  
 
TODO POR JESUS Y MARIA. | 
			 
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		Albert + Moderador
  
 
  Registrado: 03 Oct 2005 Mensajes: 27940 Ubicación: Puerto Rico
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           Publicado:
            Jue Feb 02, 2006 5:22 pm    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				Hermano Tomás:
 
 
 	  | Tomás Bertrán Mercader escribió: | 	 		  | Albert, y yo añadiría que la Virgen María también murió sin conocer la corrupción para así sumarse a la redención de Cristo y vencer la muerte. Por eso es co-redentora con Cristo. María se sumó a la crucifixión a su Hijo en el Gólgota y se sumó también a su muerte y resurrección, y no creo estar en contra del Magisterio de la Iglesia. Si lo estuviese, rectificaría automáticamente. | 	  
 
 
De acuerdo contigo. No es dogma de fe la co-redención sin embargo, pero estoy de acuerdo como lo presentas. Dios te bendiga. _________________
   
 
Transfíge, dulcíssime Dómine Jesu
 
Albert González Villanueva, OFS | 
			 
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		Albert + Moderador
  
 
  Registrado: 03 Oct 2005 Mensajes: 27940 Ubicación: Puerto Rico
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           Publicado:
            Jue Feb 02, 2006 7:09 pm    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				Estimado Padre March:
 
 
 	  | José March escribió: | 	 		  Así es Cristo no era lo mismo que María.
 
 
Pero ahora SÍ. En cuanto semejanza PLENA.
 
 
María si murió o no, teológicamente está claro (sí), aunque no sea definido magisterialmente... pero ha alcanzado la misma Gloria de su Hijo.
 
 
He ahí lo que puede hacer caer en el error y la confusión: se cree en María sólo desde las cosas de esta tierra -históricamente- pero NO desde las cosas del Cielo. Por eso, quien no experimenta la acción salvadora de la Virgen desde el Cielo, no puede entender estas cosas.
 
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Cabría hablar aquí de qué significa MUERTE. Pues parece ser que la confusión sí que está ahí... | 	  
 
 
Creo que el error está en decir Cristo era igual que María y no María se hace igual a Cristo, la segunda aseveración es correcta la primera no. En efecto debe entenderse desde la acción salvadora de la Virgen desde el cielo. No encuentro una frase que lo describa mejor, muchas gracias por así exponerlo. Dios le bendiga. _________________
   
 
Transfíge, dulcíssime Dómine Jesu
 
Albert González Villanueva, OFS | 
			 
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		Albert + Moderador
  
 
  Registrado: 03 Oct 2005 Mensajes: 27940 Ubicación: Puerto Rico
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           Publicado:
            Jue Feb 02, 2006 7:22 pm    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				AMEN!!!!! _________________
   
 
Transfíge, dulcíssime Dómine Jesu
 
Albert González Villanueva, OFS | 
			 
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		Jose Fernando Ortiz Constante
 
  Registrado: 16 Ene 2006 Mensajes: 696 Ubicación: Bogotá, Colombia
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           Publicado:
            Jue Feb 02, 2006 8:54 pm    Asunto:
            Re: ¿MARÍA MURIÓ? 
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				 	  | Krátistos escribió: | 	 		   	  | Jose Fernando Ortiz escribió: | 	 		  Un pensamiento ante tanta controversia....
 
Dice el apóstol Pablo:
 
Escuchen, les voy a revelar un gran misterio:
 
no todos moriremos.....pero todos seremos transformados.
 
En un instante, en un abrir y cerra de ojos, al son de la última trompeta, los muertos resucitarán incorruptibles y nosotros seremos transformados. Porque es necesario que este cuerpo corruptible se revista de incorruptibilidad y que este ser mortal se revista de inmortalidad.
 
Dice:todos seremos transformados, pero no todos moriremos....
 
 
Pregunta:
 
Si María, de acuerdo con las enseñanzas apostólicas y proféticas, era llena de Gracia....desde  su misma "concepción", no era ya un ser inmortal con un cuerpo incorruptible?
 
Queda abierta la reflexión..... | 	  
 
 
Te devuelvo la pregunta:
 
Si Cristo era lo mismo que María, y además era Dios, ¿cómo es que murió? | 	  
 
 
Supongo, querido amigo Krátistos, que hay saber distinguir entre la muerte corporal, es decir, el abandono y disolución de la materia, y la muerte del espíritu para Dios.
 
Somos materia y espíritu. Pablo intenta decirlo, aunque supongo nos corresponde a nosotros profundizar sus ideas místico-espirituales con los conociemientos que hoy tenemos al respecto luego de dos mil años.....
 
Pablo nos dice:
 
Un ser inmortal
 
un cuerpo incorrupto
 
 
Sigamos meditando en tan grandioso misterio, vale la pena..... _________________ I de Juan 1,1-4
 
Nosotros, Señor, te vemos y escuchamos.....
 
 
 
IGLESIA_MADRE UNIVERSAL.....
 
MUJER revestida de sol....
 
Dios....en/con.... nosotros. | 
			 
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		Carlos Pacahuala Asiduo
 
  Registrado: 02 Oct 2005 Mensajes: 110 Ubicación: Lima - PERÚ
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           Publicado:
            Jue Feb 02, 2006 9:21 pm    Asunto:
            GRACIAS 
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				No quiero dejar de agradecerles a todos por sus intervenciones. 
 
 
Deberaa que encuentro tanto por aprender y a la vez mucho de que tener cuidado de no decir.
 
 
Adelante. _________________ Amemos la Verdad y Defendamos la Vida | 
			 
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		Albert + Moderador
  
 
  Registrado: 03 Oct 2005 Mensajes: 27940 Ubicación: Puerto Rico
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           Publicado:
            Jue Feb 02, 2006 9:33 pm    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				Hermana Maru:
 
 
Para estar claros, lo que el Magisterio enseña y Padre March y yo estamos de acuerdo es que Jesús no era igual a María, ni María se hizo igual a Jesús sino que Jesús le dio plenitud de semejanza en sí mismo a María.
 
 
La unión de la Madre con el Hijo en la obra de la salvación se manifiesta desde el momento de la concepción virginal de Cristo hasta su muerte. El Concilio Vaticano II señala los siguientes momentos característicos En la Visitación; en la Natividad (también junto a los pastores y los magos); en el Templo (ante el, anciano Simeón); otra vez en el Templo Jesús perdido y hallado); en Caná de Galilea (las bodas); en el decurso de la predicación del Señor; al pié de la Cruz y, desde la Asunción a los cielos.
 
 
 
Al aceptar María su divina maternidad y formarse Jesús en su seno, no sólo se está formando el Jesús hecho hombre, Jesús histórico que vivió en Palestina hace dos mil años, sino también la cabeza de un gran Cuerpo místico; ha comenzado a constituirse un gran organismo que es el "Cristo místico" que será la Iglesia. María, por tanto, interviene de modo activo en la obra de la redención y, por ello, es pieza clave de la historia de la salvación 
 
 
En ese sentido no solo el fiat de María le permite estar en este privilegiado momento en la historia de salvación sino que el mismo Dios formandose en su vientre le va formando a ella haciendola igual a Él. Algo parecido nos ocurre a nosotros cuando cosumimos a Cristo en la Eucaristía, mientras le consumimos es Él quien nos consume. Dios te bendiga mucho. _________________
   
 
Transfíge, dulcíssime Dómine Jesu
 
Albert González Villanueva, OFS | 
			 
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		Albert + Moderador
  
 
  Registrado: 03 Oct 2005 Mensajes: 27940 Ubicación: Puerto Rico
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           Publicado:
            Jue Feb 02, 2006 9:40 pm    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				Hermana Maru:
 
 
 	  | Maru Courtney escribió: | 	 		   	  | Albert escribió: | 	 		  Hermana Maru:
 
 
Para estar claros, lo que el Magisterio enseña y Padre March y yo estamos de acuerdo es que Jesús no era igual a María, ni María se hizo igual a Jesús sino que Jesús le dio plenitud de semejanza en sí mismo a María.
 
 
La unión de la Madre con el Hijo en la obra de la salvación se manifiesta desde el momento de la concepción virginal de Cristo hasta su muerte. El Concilio Vaticano II señala los siguientes momentos característicos En la Visitación; en la Natividad (también junto a los pastores y los magos); en el Templo (ante el, anciano Simeón); otra vez en el Templo Jesús perdido y hallado); en Caná de Galilea (las bodas); en el decurso de la predicación del Señor; al pié de la Cruz y, desde la Asunción a los cielos.
 
 
 
Al aceptar María su divina maternidad y formarse Jesús en su seno, no sólo se está formando el Jesús hecho hombre, Jesús histórico que vivió en Palestina hace dos mil años, sino también la cabeza de un gran Cuerpo místico; ha comenzado a constituirse un gran organismo que es el "Cristo místico" que será la Iglesia. María, por tanto, interviene de modo activo en la obra de la redención y, por ello, es pieza clave de la historia de la salvación 
 
 
En ese sentido no solo el fiat de María le permite estar en este privilegiado momento en la historia de salvación sino que el mismo Dios formandose en su vientre le va formando a ella haciendola igual a Él. Algo parecido nos ocurre a nosotros cuando cosumimos a Cristo en la Eucaristía, mientras le consumimos es Él quien nos consume. Dios te bendiga mucho. | 	  
 
 
Asi es mi querido Albert, exactamente eso es lo que entiendo y crei que asi lo habia puesto, si hubo alguna confusion, pido una disculpa por no saber expresarme.  Estoy 100% de acuerdo con tu aporte. | 	  
 
 
Pues no hay confusión entonces. Dios te cuide. _________________
   
 
Transfíge, dulcíssime Dómine Jesu
 
Albert González Villanueva, OFS | 
			 
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		Fabrem Veterano
 
  Registrado: 05 Oct 2005 Mensajes: 1226
 
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           Publicado:
            Jue Feb 02, 2006 9:53 pm    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				 	  | Albert escribió: | 	 		  Hermana Maru:
 
 
Para estar claros, lo que el Magisterio enseña y Padre March y yo estamos de acuerdo es que Jesús no era igual a María, ni María se hizo igual a Jesús sino que Jesús le dio plenitud de semejanza en sí mismo a María.
 
 
 | 	  
 
 
Estimado Albert, como sabes soy mariano y pienso que no hay suficientes palabras para exaltar la grandeza de María; pienso que sólo el Espíritu Santo puede echarle los piropos que en justicia se merece, por lo tanto mi pregunta no es para cuestionarte, sino para enterarme. ¿En qué documento enseña el Magisterio lo que te marco en negrilla en tu texto, o sea, esa 'plenitud de la semejanza a sí mismo que le dio Jesús a María'? ¿O es esto lo que tú entiendes que enseña el Magisterio por lo que has leído? Perdón, pero sí tengo esta duda puntual.
 
 
Gracias por  tu respuesta. | 
			 
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		Krátistos Asiduo
 
  Registrado: 22 Dic 2005 Mensajes: 364
 
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           Publicado:
            Jue Feb 02, 2006 10:04 pm    Asunto:
            Re: ¿MARÍA MURIÓ? 
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				Veo que mi afirmación causo sensación, pero quisiera aclarar antes que nada su contexto:
 
Está escrita en respuesta inmediata al mensaje de José Fernando que decía:
 
 
Si María, de acuerdo con las enseñanzas apostólicas y proféticas, era llena de Gracia....desde  su misma "concepción", no era ya un ser inmortal con un cuerpo incorruptible?
 
 
De aquí yo escribí:
 
 
Si Cristo era lo mismo que María, y además era Dios, ¿cómo es que murió?
 
 
Aclarando: Cristo era lo mismo que María en cuanto que también nació con la plenitud de la gracia y sin macha de pecado ...desde su misma concepción, y además era Dios... 
 
 
Y esta pregunta:
 
¿como es que murió?
 
la puse para caer en la cuenta de que María no podría ser inmortal, en cuanto a su cuerpo, como respuesta la pregunta de José Fernando.
 
 
Mi respuesta quizá debió ser mas clara desde el primer momento y pido disculpas por no haberlo hecho así. Cito nuevamente el mensaje para que puedan verificarlo.
 
 
 	  | Krátistos escribió: | 	 		   	  | Jose Fernando Ortiz escribió: | 	 		  Un pensamiento ante tanta controversia....
 
Dice el apóstol Pablo:
 
Escuchen, les voy a revelar un gran misterio:
 
no todos moriremos.....pero todos seremos transformados.
 
En un instante, en un abrir y cerra de ojos, al son de la última trompeta, los muertos resucitarán incorruptibles y nosotros seremos transformados. Porque es necesario que este cuerpo corruptible se revista de incorruptibilidad y que este ser mortal se revista de inmortalidad.
 
Dice:todos seremos transformados, pero no todos moriremos....
 
 
Pregunta:
 
Si María, de acuerdo con las enseñanzas apostólicas y proféticas, era llena de Gracia....desde  su misma "concepción", no era ya un ser inmortal con un cuerpo incorruptible?
 
Queda abierta la reflexión..... | 	  
 
 
Te devuelvo la pregunta:
 
Si Cristo era lo mismo que María, y además era Dios, ¿cómo es que murió? | 	 
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		Albert + Moderador
  
 
  Registrado: 03 Oct 2005 Mensajes: 27940 Ubicación: Puerto Rico
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           Publicado:
            Jue Feb 02, 2006 10:09 pm    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				Hermano Alejandro:
 
 
 	  | Alejandro Berganza escribió: | 	 		   	  | Albert escribió: | 	 		  Hermana Maru:
 
 
Para estar claros, lo que el Magisterio enseña y Padre March y yo estamos de acuerdo es que Jesús no era igual a María, ni María se hizo igual a Jesús sino que Jesús le dio plenitud de semejanza en sí mismo a María.
 
 
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Estimado Albert, como sabes soy mariano y pienso que no hay suficientes palabras para exaltar la grandeza de María; pienso que sólo el Espíritu Santo puede echarle los piropos que en justicia se merece, por lo tanto mi pregunta no es para cuestionarte, sino para enterarme. ¿En qué documento enseña el Magisterio lo que te marco en negrilla en tu texto, o sea, esa 'plenitud de la semejanza a sí mismo que le dio Jesús a María'? ¿O es esto lo que tú entiendes que enseña el Magisterio por lo que has leído? Perdón, pero sí tengo esta duda puntual.
 
 
Gracias por  tu respuesta. | 	  
 
 
Se desprende de los datos que dí más arriba, pero quizas aquí puedas encontrar algo que te arroje luz.
 
 
 	  | Cita: | 	 		   Cuando proclama a María «Madre de Dios», la Iglesia profesa con una única expresión su fe en el Hijo y en la Madre. Esta unión aparece ya en el concilio de Éfeso; con la definición de la maternidad divina de María los padres querían poner de relieve su fe en la divinidad de Cristo. A pesar de las objeciones, antiguas y recientes, sobre la oportunidad de reconocer a María ese título, los cristianos de todos los tiempos, interpretando correctamente el significado de esa maternidad, la han convertido en expresión privilegiada de su fe en la divinidad de Cristo y de su amor a la Virgen. 
 
 
En la Theotokos la Iglesia, por una parte, encuentra la garantía de la realidad de la Encarnación, porque, como afirma san Agustín, «si la Madre fuera ficticia, sería ficticia también la carne (...) y serían ficticias también las cicatrices de la resurrección» (Tract. in Ev. Ioannis, 8, 6 7). Y, por otra, contempla con asombro y celebra con veneración la inmensa grandeza que confirió a María Aquel que quiso ser hijo suyo. La expresión «Madre de Dios» nos dirige al Verbo de Dios, que en la Encarnación asumió la humildad de la condición humana para elevar al hombre a la filiación divina. Pero ese título, a la luz de la sublime dignidad concedida a la Virgen de Nazaret, proclama también la nobleza de la mujer y su altísima vocación. En efecto, Dios trata a María como persona libre y responsable y no realiza la encarnación de su Hijo sino después de haber obtenido su consentimiento. Siguiendo el ejemplo de los antiguos cristianos de Egipto, los fieles se encomiendan a Aquella que, siendo Madre de Dios, puede obtener de su Hijo divino las gracias de la liberación de los peligros y de la salvación eterna. (tomado de encuentra.com) | 	  
 
 
Quizas Padre March nos pueda aportar datos adicionales. Dios te bendiga _________________
   
 
Transfíge, dulcíssime Dómine Jesu
 
Albert González Villanueva, OFS | 
			 
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		Krátistos Asiduo
 
  Registrado: 22 Dic 2005 Mensajes: 364
 
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           Publicado:
            Jue Feb 02, 2006 10:14 pm    Asunto:
            Re: ¿MARÍA MURIÓ? 
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				 	  | Jose Fernando Ortiz escribió: | 	 		  
 
Supongo, querido amigo Krátistos, que hay saber distinguir entre la muerte corporal, es decir, el abandono y disolución de la materia, y la muerte del espíritu para Dios.
 
Somos materia y espíritu. Pablo intenta decirlo, aunque supongo nos corresponde a nosotros profundizar sus ideas místico-espirituales con los conociemientos que hoy tenemos al respecto luego de dos mil años.....
 
Pablo nos dice:
 
Un ser inmortal
 
un cuerpo incorrupto
 
 
Sigamos meditando en tan grandioso misterio, vale la pena..... | 	  
 
 
Estoy de acuerdo contigo, hay que distinguir entre lo que se siembra y lo que resucita. Creo que para ello es muy iluminador el texto de San Pablo a este respecto, en el que distingue lo que somos ahora y lo que seremos cuando resucitemos:
 
 
ICor 15
 
42 Así también en la resurrección de los muertos: se siembra corrupción, resucita incorrupción; 
 
43 se siembra vileza, resucita gloria; se siembra debilidad, resucita fortaleza; 
 
44 se siembra un cuerpo natural, resucita un cuerpo espiritual. Pues si hay un cuerpo natural, hay también un cuerpo espiritual. 
 
45 En efecto, así es como dice la Escritura: Fue hecho el primer hombre, Adán, alma viviente; el último Adán, espíritu que da vida. 
 
46 Mas no es lo espiritual lo que primero aparece, sino lo natural; luego, lo espiritual. 
 
47 El primer hombre, salido de la tierra, es terreno; el segundo, viene del cielo. 
 
48 Como el hombre terreno, así son los hombres terrenos; como el celeste, así serán los celestes. 
 
49 Y del mismo modo que hemos llevado la imagen del hombre terreno, llevaremos también la imagen del celeste. 
 
50 Os digo esto, hermanos: La carne y la sangre no pueden heredar el Reino de los cielos: ni la corrupción hereda  la incorrupción. 
 
51 ¡Mirad! Os revelo un misterio: No moriremos todos, mas todos seremos transformados. 
 
52 En un instante, en un pestañear de ojos, al toque de la trompeta final, pues sonará la trompeta, los muertos resucitarán incorruptibles y nosotros seremos transformados. 
 
53 En efecto, es necesario que este ser corruptible se revista de incorruptibilidad; y que este ser mortal se revista de inmortalidad. 
 
54 Y cuando este ser corruptible se revista de incorruptibilidad y este ser mortal se revista de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: La muerte ha sido devorada en la victoria. 
 
55 ¿Dónde está, oh muerte, tu victoria? ¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? 
 
56 El aguijón de la muerte es el pecado; y la fuerza del pecado, la Ley. 
 
57 Pero ¡gracias sean dadas a Dios, que nos da la victora por nuestro Señor Jesucristo! 
 
58 Así pues, hermanos míos amados, manteneos firmes, inconmovibles, progresando siempre en la obra del Señor, conscientes de que vuestro trabajo no es vano el el Señor. | 
			 
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		Fabrem Veterano
 
  Registrado: 05 Oct 2005 Mensajes: 1226
 
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           Publicado:
            Jue Feb 02, 2006 10:25 pm    Asunto:
             
            Tema: ¿MARÍA MURIÓ?  | 
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				 	  | Albert escribió: | 	 		  Hermano Alejandro:
 
 
 	  | Alejandro Berganza escribió: | 	 		   	  | Albert escribió: | 	 		  Hermana Maru:
 
 
Para estar claros, lo que el Magisterio enseña y Padre March y yo estamos de acuerdo es que Jesús no era igual a María, ni María se hizo igual a Jesús sino que Jesús le dio plenitud de semejanza en sí mismo a María.
 
 
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Estimado Albert, como sabes soy mariano y pienso que no hay suficientes palabras para exaltar la grandeza de María; pienso que sólo el Espíritu Santo puede echarle los piropos que en justicia se merece, por lo tanto mi pregunta no es para cuestionarte, sino para enterarme. ¿En qué documento enseña el Magisterio lo que te marco en negrilla en tu texto, o sea, esa 'plenitud de la semejanza a sí mismo que le dio Jesús a María'? ¿O es esto lo que tú entiendes que enseña el Magisterio por lo que has leído? Perdón, pero sí tengo esta duda puntual.
 
 
Gracias por  tu respuesta. | 	  
 
 
Se desprende de los datos que dí más arriba, pero quizas aquí puedas encontrar algo que te arroje luz.
 
 
 	  | Cita: | 	 		   Cuando proclama a María «Madre de Dios», la Iglesia profesa con una única expresión su fe en el Hijo y en la Madre. Esta unión aparece ya en el concilio de Éfeso; con la definición de la maternidad divina de María los padres querían poner de relieve su fe en la divinidad de Cristo. A pesar de las objeciones, antiguas y recientes, sobre la oportunidad de reconocer a María ese título, los cristianos de todos los tiempos, interpretando correctamente el significado de esa maternidad, la han convertido en expresión privilegiada de su fe en la divinidad de Cristo y de su amor a la Virgen. 
 
 
En la Theotokos la Iglesia, por una parte, encuentra la garantía de la realidad de la Encarnación, porque, como afirma san Agustín, «si la Madre fuera ficticia, sería ficticia también la carne (...) y serían ficticias también las cicatrices de la resurrección» (Tract. in Ev. Ioannis, 8, 6 7). Y, por otra, contempla con asombro y celebra con veneración la inmensa grandeza que confirió a María Aquel que quiso ser hijo suyo. La expresión «Madre de Dios» nos dirige al Verbo de Dios, que en la Encarnación asumió la humildad de la condición humana para elevar al hombre a la filiación divina. Pero ese título, a la luz de la sublime dignidad concedida a la Virgen de Nazaret, proclama también la nobleza de la mujer y su altísima vocación. En efecto, Dios trata a María como persona libre y responsable y no realiza la encarnación de su Hijo sino después de haber obtenido su consentimiento. Siguiendo el ejemplo de los antiguos cristianos de Egipto, los fieles se encomiendan a Aquella que, siendo Madre de Dios, puede obtener de su Hijo divino las gracias de la liberación de los peligros y de la salvación eterna. (tomado de encuentra.com) | 	  
 
 
Quizas Padre March nos pueda aportar datos adicionales. Dios te bendiga | 	  
 
 
Estimado Albert, muchas gracias por tus esfuerzos para responderme. Yo no es que ponga en duda nada o que tenga alguna duda respecto de la luminosidad del misterio de María. Por de pronto no tengo ninguna duda sobre el papel de María en la salvación y soy uno de los que rezo para que se promulgue pronto el dogma de la corredención. 
 
 
Quizá no me expresé bien. Yo lo único que quiero saber es si el Magisterio enseña esa 'plenitud de la semejanza a sí mismo que le dio Jesús a María, o si son palabras y conceptos tuyos para expresar los que has entendido de lo que has leído del Magisterio. Eso es todo realmente. Tampco cuestiono lo que dices. La duda es bien simple, realmente. | 
			 
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