La sabiduria no esta en la razón, sino en el amor

[siempreMaria]

Hola hermanos.

Me gustaría por si podríais comentar esta frase.

Un abrazo en Cristo y María.
_________________
Con Dios y Mamita.

"Callad mientras duerme y descansa el Señor y Dios mío porque muy pronto lo despertarán los pecados de los hombres"

http://anti-zeitgeist.blogspot.com/2008/11/hola-todos.html
http://todocatolico.blogspot.com/

[Argento]

Ya lo dijo Sócrates: Solo se que no se nada.

Entonces, la sabiduría para mi está en la humildad de saber que uno no conoce todo ni lo puede todo.
_________________

[siempreMaria]

[tico1618]

Si yo hablara lenguas humanas y angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena o címbalo que retiñe.
Y si tuviera profecía, y entendiera todos los misterios y todo conocimiento, y si tuviera toda la fe, de tal manera que trasladara los montes, y no tengo amor, nada soy.
Y si repartiera todos mis bienes para dar de comer a los pobres, y si entregara mi cuerpo para ser quemado, y no tengo amor, de nada me sirve.
El amor es sufrido, es benigno;
el amor no tiene envidia;
el amor no es jactancioso, no se envanece,
no hace nada indebido, no busca lo suyo,
no se irrita, no guarda rencor;
no se goza de la injusticia,
sino que se goza de la verdad.
Todo lo sufre, todo lo cree,
todo lo espera, todo lo soporta.
El amor nunca deja de ser; pero las profecías se acabarán, cesarán las lenguas y el conocimiento se acabará.
En parte conocemos y en parte profetizamos;
pero cuando venga lo perfecto, entonces lo que es en parte se acabará.
Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño, juzgaba como niño; pero cuando ya fui hombre, dejé lo que era de niño.
Ahora vemos por espejo, oscuramente; pero entonces veremos cara a cara. Ahora conozco en parte, pero entonces conoceré como fui conocido.
Ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor, estos tres; pero el mayor de ellos es el amor. 1 Cor. 13 1-13.

Si leemos con detenimiento lograremos apreciar que el amor no es un sentimiento como comunmente creemos, más bien es una actitud de vida
por eso, considero que la sabiduria y el amor no son lo mismo porque se puede tener una carecer de otra...

conosco a gente que sabe muchisisimo, y en su arrogancia no permiten que la gracia de nuestro señor toque su corazón, más sin embargo en parte contraria hay personas que aún sin saber mucho, con solo una mirada, un abrazo, o un consuelo, te pueden hacer sentir bien...

Es cuestión de apreciación, puedo estar errado, pero al final es uno mismo quien decide de todo lo que se plantea que es bueno o malo,
siempre pasalo por el filtro de tu alma, porque ahi adentro hábita nuestro señor en cada de uno de nosotros y por consecuencia lógica ahí esta la verdad, y la verdad nos hará libres...
_________________
sigo siendo yo, apesar de todo, GRACIAS a DIOS!!!!!!, po permitir que esto pase!!!!

[siempreMaria]

Hola hermano tico.

Gracias por tu aportación.

Puntualizarte una de las cosas que has dicho:

[Dalmiant]

[sr_de_la_torre]

A mi modo de ver, sabiduría es al amor a Dios. El verdadero amor a Dios.

Podría ser una persona muy ingeniosa y hábil mentalmente, pero esa no es sabiduría.
También podría tener un conocimiento muy amplio sobre las ciencias, como aquellos griegos que inmediatamente nos vienen a la memoria, pero si no se tiene a Dios no está completa; y digo si no se tiene a Dios, por que quien lo tiene es por que lo busca y lo ama, y quien ama a Dios, Él lo infunde ese don precioso de la Sabiduría para hacer lo que es correcto.

Por lo tanto, y siguiendo este razonamiento, el que hace lo correcto por haber buscado y amado a Dios, es sabio. Y ya no depende de nustro mero juicio, sino del conocimiento que nos inspira el Señor para obrar lo justo. Hubo en la antigüedad, me parece que Séneca, si no el corríjanme please, que dijo, que la sabiduría es el tener el conocimiento de las cosas para aprovecharlo bien. Que el conocimiento sea enfocado a la bondad. Eso es sabiduría. Por ende, la sabiduría necesita de la razón y del amor. Pero no cualquier razón, sino la verdadera Razón, que es Dios.

Hubo un templo enorme y hermoso levantado en tiempos remotos por antiguos cristianos, llamado Santa Sabiduría, para alabar a Dios. La sabiduría alaba a Dios. Santa Sophia. Creo que amor y sabiduría viene de la mano.

[AQUITANO]

¡Hermoso tema!

Un aporte de nuestro Benedicto XVI en Deus Caritas Est


18. De este modo se ve que es posible el amor al prójimo en el sentido enunciado por la Biblia, por Jesús. Consiste justamente en que, en Dios y con Dios, amo también a la persona que no me agrada o ni siquiera conozco. Esto sólo puede llevarse a cabo a partir del encuentro íntimo con Dios, un encuentro que se ha convertido en comunión de voluntad, llegando a implicar el sentimiento. Entonces aprendo a mirar a esta otra persona no ya sólo con mis ojos y sentimientos, sino desde la perspectiva de Jesucristo. Su amigo es mi amigo. Más allá de la apariencia exterior del otro descubro su anhelo interior de un gesto de amor, de atención, que no le hago llegar solamente a través de las organizaciones encargadas de ello, y aceptándolo tal vez por exigencias políticas. Al verlo con los ojos de Cristo, puedo dar al otro mucho más que cosas externas necesarias: puedo ofrecerle la mirada de amor que él necesita. En esto se manifiesta la imprescindible interacción entre amor a Dios y amor al prójimo, de la que habla con tanta insistencia la Primera carta de Juan. Si en mi vida falta completamente el contacto con Dios, podré ver siempre en el prójimo solamente al otro, sin conseguir reconocer en él la imagen divina. Por el contrario, si en mi vida omito del todo la atención al otro, queriendo ser sólo «piadoso» y cumplir con mis «deberes religiosos», se marchita también la relación con Dios. Será únicamente una relación «correcta», pero sin amor. Sólo mi disponibilidad para ayudar al prójimo, para manifestarle amor, me hace sensible también ante Dios. Sólo el servicio al prójimo abre mis ojos a lo que Dios hace por mí y a lo mucho que me ama. Los Santos —pensemos por ejemplo en la beata Teresa de Calcuta— han adquirido su capacidad de amar al prójimo de manera siempre renovada gracias a su encuentro con el Señor eucarístico y, viceversa, este encuentro ha adquirido realismo y profundidad precisamente en su servicio a los demás. Amor a Dios y amor al prójimo son inseparables, son un único mandamiento. Pero ambos viven del amor que viene de Dios, que nos ha amado primero. Así, pues, no se trata ya de un «mandamiento» externo que nos impone lo imposible, sino de una experiencia de amor nacida desde dentro, un amor que por su propia naturaleza ha de ser ulteriormente comunicado a otros. El amor crece a través del amor. El amor es «divino» porque proviene de Dios y a Dios nos une y, mediante este proceso unificador, nos transforma en un Nosotros, que supera nuestras divisiones y nos convierte en una sola cosa, hasta que al final Dios sea «todo para todos» cf. 1 Co 15, 28


En Cristo
_________________
El Espíritu Santo nos otorgue discernimiento

[deMaria]

Esta frase podría ser cierta si entendieramos el amor en su sentido más puro,pero no como una excusa para hacer lo que te da la gana.
Si amamos como Dios quiere que lo hagamos,entonces no se puede ser más sabio.Pero el amor no debe estar manchado con la sobervia, el egoismo,la pereza etc
Yo creo que hay gente que se excusa utilizando la palabra amor,de ciertos comportamientos que en el fondo,ellos saben que no se basan en el amor.Se trata de una palabra hueca,de retórica.
Por ejemplo,cuando se habla solo para quedar bien delante de los demás,entonces no actuamos con amor aunque lo digamos,y en el fondo de nuestro corazón,sabemos que nos ha podido la vanidad.
_________________
"En Dios vivimos, nos movemos y existimos"

[HomoViator]

Precisamente hace unos días escuché en el programa de Monseñor Ignacio Munilla, de Radio María, una frase que resumía todo nuestro amor de cara a Dios . a Dios se le ama con la fe, no con los sentimientos

Si amamos atados a la razón, ella misma está limitada, porque no conoce su verdadero fin. La fe nos muestra el camino, y la razón nos da un par de piernas. El que deambula razonando, y se cree sabio en su posesión, solo da coces de burro y acabará perdido en sí mismo. El verdadero sabio consigue solapar la razón debajo de la fe; no la anula, le arroja la luz que le da el entendimiento, el amar con los ojos de la fe. Como María, nuestra madre, desde su fiat, no se hizo sabia por la razón, sino al hacerse esclava del amor.
_________________


JESUS IS MY LIFE